En estos tiempos de crisis es muy fácil encontrar personas en una situación económica difícil que les hace imposible hacer frente a los cargos de una hipoteca que en su día pensaron podían asumir sin problemas. En este artículo escribiremos primero sobre qué sucede cuando se dejan de pagar las cuotas de la hipoteca, para posteriormente indicar cómo se debe negociar con el banco para evitar ir a juicio.
Lo mejor para que entendamos correctamente todos los conceptos es utilizar un caso práctico. Supongamos un matrimonio que sin disponer de dinero ahorrado y con tan sólo 1.900 euros de ingresos decide en junio de 2005, momento en el cual el Euribor se encontraba muy bajo, acometer la compra de una vivienda que ellos consideran barata y cuyo precio era de 190.000 euros.