Recomendaciones al reformar el baño de tu hogar

Está claro que el baño es una de las estancias más indispensables y primordiales de un hogar, esto conlleva que sean muchas las personas que se plantean su reforma, sobre todo si acaban de adquirir una vivienda de segunda mano. Actualmente la reforma de un baño puede acometerse de formas muy variadas y sin causar demasiadas molestias; eso sí, para conseguirlo es necesario solicitar la ayuda de profesionales y expertos en este tipo de remodelaciones.

Por eso, si te planteas la reforma del baño de tu hogar te aconsejamos que visites las páginas webs de empresas especializadas, como por ejemplo SecuriBath (nosotros contratamos sus servicios para remodelar el cuarto de baño de nuestra casa y lo hicieron de una forma profesional, rápida, eficiente y a un coste realmente asequible). Ten en cuenta que diseñar un cuarto de baño bonito y funcional es todo un arte, resultando aconsejable que en el proceso participen expertos en diseño e interiorismo.

Consejos al remodelar el baño

No obstante, si tomas la decisión de reformar el baño de tu hogar, te aconsejamos que sigas las siguientes recomendaciones:

Cuándo cambiar los sanitarios

El primer paso es evaluar la necesidad de reemplazar los sanitarios (inodoro, lavabos, bidé, bañera o ducha) por unos más modernos. Todo dependerá de su estado. En ocasiones puede ser suficiente cambiar la tapa del inodoro y/o reemplazar la grifería por una más actual.

Si tienes necesidad de espacio en el cuarto de baño puedes plantearte la posibilidad de deshacerte del bidé. Otra opción es reemplazar la bañera por un plato de ducha, esta es una forma no solo de ganar espacio, sino también de ahorrar agua. Además, piensa que acceder a un plato de ducha es mucho más sencillo que meterse en una bañera, por lo que estaremos facilitando la vida a los niños pequeños o a las personas mayores que convivan con nosotros.

También deberás decidir si instalar o no una mampara (o cambiarla si la bañera o ducha cuenta con una). En nuestra opinión no tiene demasiado sentido gastarse el dinero en reformar un baño y no poner o cambiar la mampara.

Cuándo cambiar los accesorios del baño

Nuestro consejo es que si quieres cambiar la apariencia de tu baño, cambies siempre los accesorios (portacepillos, portarrollos, jaboneras, colgadores de toallas, armarios, espejos, etcétera). Son los elementos más visibles y los que darán un aspecto diferente a tu baño.

Cuando cambiar el alicatado y el suelo

Es uno de los cambios más costoso en un cuarto de baño. Si puedes evitarlo te ahorrarás un montón de dinero. En el mercado existen esmaltes sintéticos que mejorarán notablemente el aspecto de los azulejos, pudiendo evitar el tener que reemplazarlos. En cuanto al suelo, también existen pinturas o revestimientos que se pueden colocar sobre el suelo existente sin tener que reemplazarlo.

Si tomas la decisión de reemplazar el suelo, entonces deberás también renovar la fontanería (no tiene sentido no hacerlo una vez levantado el suelo).

Cuida la iluminación del nuevo baño

En el baño es importante tener iluminación directa en la zona del espejo para poder verte correctamente cuando estés delante del mismo, ya sea afeitándote, peinándote, maquillándote o secándote el pelo. En el resto del cuarto de baño bastará con tener una iluminación indirecta.

Planifica y elije el mejor diseño para tu baño

Una vez que hayas decidido los cambios a realizar, deberás pedir presupuestos a diferentes empresas. Los presupuestos deben ser todo lo detallado posibles.

Posteriormente será necesario que la empresa o el profesional que contrates te presente diferentes bocetos y diseños con el que sería el resultado final de la remodelación, así como una estimación de la duración de la obra y los diferentes precios de cada propuesta (que no deben ser muy diferentes al precio del presupuesto inicial). En base a esta información podrás tomar la decisión correcta y elegir aquel proyecto y diseño que más se ajuste a tus necesidades de precio y tiempo.

Elije siempre aquel proyecto que muestre una distribución funcional; eso sí, sin olvidarse de la seguridad.